1- Inicio de la guerra
El inicio de la Primera Guerra Mundial fue el resultado de una serie de eventos complejos y tensiones políticas en Europa a principios del siglo XX.
– Asesinato de Francisco Fernando (28 de junio de 1914): El archiduque Francisco Fernando de Austria-Hungría fue asesinado en Sarajevo por Gavrilo Princip, un nacionalista serbio. Este asesinato desencadenó una serie de eventos que llevaron a la declaración de guerra.
– Declaraciones de guerra (julio-agosto de 1914): Después del asesinato, Austria-Hungría declaró la guerra a Serbia. A medida que las alianzas militares se activaron, otros países se unieron al conflicto. Rusia apoyó a Serbia, Alemania respaldó a Austria-Hungría, Francia y el Reino Unido se unieron en defensa de Bélgica y Francia.
-Invasión de Bélgica (agosto de 1914): Alemania invadió Bélgica para llegar a Francia más rápidamente, lo que provocó la entrada del Reino Unido en la guerra en apoyo de Bélgica y Francia.
– Desarrollo de frentes occidental y oriental: La guerra se desarrolló en dos frentes principales: el Frente Occidental, donde las fuerzas alemanas se enfrentaron a las fuerzas franco-británicas; y el Frente Oriental, donde Alemania y Austria-Hungría lucharon contra Rusia.
– Tensiones preexistentes: Antes del asesinato de Francisco Fernando, ya existían tensiones significativas entre las potencias europeas debido a rivalidades imperiales, nacionalismos extremos, alianzas militares y competencia económica.
El 4 de agosto de 1914, el mundo estaba completamente inmerso en la guerra después de que Alemania invadiera Bélgica y el Reino Unido declarara la guerra a Alemania.
Con todo el escenario previo al estallido de la Primera guerra mundial, el conflicto fue casi inevitable: fue cuestión de tiempo para que se detonaran todos los pactos e influencias previas establecidas.
Cuando se inicia el conflicto, las coaliciones se modificaron: Italia se une a la Triple Entente por un conflicto que tuvo con Austria-Hungría, y a la Triple Alianza se unieron Bulgaria y el Imperio Turco.
2- El desarrollo de la guerra
La guerra se desarrolló entre el 4 de Agosto de 1914 y el 11 de noviembre de 1818, pasando por una serie de fases que revisaremos a continuación.
2.1- La guerra de los movimientos (1914)
La guerra de movimientos en la Primera Guerra Mundial se refiere a la fase inicial del conflicto, que tuvo lugar en 1914. Durante este período, las fuerzas armadas de las potencias involucradas intentaron movimientos tácticos rápidos y maniobras para ganar ventaja estratégica sobre el enemigo. La guerra de movimientos fue caracterizada por acciones ofensivas y movimientos de tropas a gran escala.
Las principales características de la guerra de movimientos incluyeron:
– Maniobras estratégicas: Los ejércitos buscaban flanquear y rodear al enemigo, buscando debilidades en sus líneas para obtener una ventaja táctica. Estos movimientos eran parte de la estrategia más amplia para ganar territorio y posición.
– Rápido avance y retroceso: Durante esta fase, los ejércitos a menudo avanzaban rápidamente hacia el territorio enemigo, solo para ser seguidos por un retroceso igualmente rápido cuando las líneas se volvían insostenibles. Esto creó una serie de avances y retrocesos a lo largo del frente occidental, en particular.
– Uso de tácticas tradicionales: Aunque la Primera Guerra Mundial presenció el uso de nuevas tecnologías militares, como ametralladoras y artillería pesada, durante la fase de guerra de movimientos, las tácticas todavía se basaban en gran medida en las estrategias tradicionales de guerra.
La guerra de movimientos llegó a su fin a medida que las líneas del frente se estabilizaron en un sistema de trincheras, dando lugar a la guerra de desgaste. Las trincheras se extendieron desde el Mar del Norte hasta la frontera suiza en el frente occidental, y la guerra se caracterizó por una prolongada lucha estática en la que las fuerzas se enfrentaron en un estancamiento que duró varios años. Este cambio marcó el comienzo de una fase diferente en la guerra, conocida como la guerra de desgaste, que se prolongó hasta 1918.
Veamos un mapa sobre la guerra de movimientos:
2.2- La guerra de las trincheras (1915-1917)
las trincheras eran líneas estáticas subterráneas para enfrentar al enemigo mediante artillería pesada y armas químicas. Al quedarse resguardados en estos verdaderos “hoyos”, sin posibilidad de avanzar o ver lo que hacía el enemigo, se produce un estancamiento en el enfrentamiento, surge mucha desesperanza entre los soldados, quienes sufren más por enfermedades que se generaban en dichos espacios que por la guerra en sí.
La guerra de trincheras fue una fase crucial de la Primera Guerra Mundial que se desarrolló principalmente en el frente occidental, aunque también hubo elementos de trincheras en el frente oriental. Esta etapa se caracterizó por la construcción de extensas líneas defensivas formadas por sistemas de trincheras, que eran redes de zanjas fortificadas, fosos y refugios subterráneos. Las características principales de la guerra de trincheras incluyeron:
– Líneas defensivas: Ambos lados del conflicto construyeron extensas redes de trincheras para protegerse del fuego enemigo. Las trincheras se extendían desde el Mar del Norte hasta la frontera suiza y estaban equipadas con alambradas, trampas y otras defensas.
– Stalemate (estancamiento): Las líneas de trincheras condujeron a un estancamiento en el frente occidental, donde las fuerzas aliadas y centrales se encontraron en una situación de empate durante largos períodos. Los intentos de avance a menudo resultaban en costosos enfrentamientos y pocas ganancias territoriales.
– Condiciones inhumanas: Las trincheras eran lugares inhóspitos y llenos de dificultades. Los soldados vivían en condiciones precarias, enfrentándose a problemas como el barro, las ratas, las enfermedades y el constante peligro de ataques enemigos.
– Guerra de desgaste: La guerra de trincheras se transformó en una guerra de desgaste, donde ambos lados intentaban agotar los recursos y la moral del enemigo a través de continuos ataques y contrataques.
– Nuevas tecnologías: Durante esta fase, se introdujeron y desarrollaron nuevas tecnologías militares, como gas venenoso, ametralladoras, tanques y aviación. Estos intentos de superar el estancamiento de las trincheras llevaron a innovaciones tácticas y tecnológicas.
La guerra de trincheras persistió desde aproximadamente 1915 hasta 1917, cuando finalmente comenzaron a producirse avances significativos. La introducción de nuevas tácticas y tecnologías, combinada con factores como la entrada de Estados Unidos en la guerra, contribuyó al cambio en el equilibrio de poder que eventualmente llevó al fin de la guerra en 1918.
una-trinchera-alemana-ocupada-por-soldados-britanicos-durante-la-batalla-del-somme
2.3- Incorporación de EE. UU (1917)
A pesar de mantenerse mucho tiempo fuera de este enfrentamiento, Estados Unidos se ve “forzado” a integrarse al bando de los aliados, debido al hundimiento del trasatlántico “Lusitania” por parte de un submarino alemán. Su llegada va a renovar las energías de esta guerra que no parecía acabar, surgiendo incluso nuevas formas de lucha: aviación, batallas navales y submarinas.
Estados Unidos se incorporó a la Primera Guerra Mundial de manera oficial el 6 de abril de 1917. Varios factores contribuyeron a la decisión de Estados Unidos de entrar en el conflicto:
– Hundimiento de buques por submarinos alemanes: A lo largo de la guerra, submarinos alemanes, conocidos como U-boats, llevaron a cabo una campaña de hundimiento de buques, atacando barcos mercantes, incluidos algunos que llevaban ciudadanos estadounidenses. El hundimiento del buque británico Lusitania en 1915, en el cual murieron más de 1200 personas, incluidos 128 estadounidenses, generó fuertes tensiones entre Estados Unidos y Alemania.
– Telegrama Zimmermann: En enero de 1917, se interceptó un telegrama del ministro de Asuntos Exteriores alemán, Arthur Zimmermann, a su embajador en México. En el telegrama, Alemania ofrecía a México el territorio perdido previamente ante Estados Unidos a cambio de su apoyo en la guerra. Esta revelación aumentó la indignación pública en Estados Unidos y fortaleció la resolución a favor de la entrada en la guerra.
– Guerra submarina indiscriminada: Alemania reanudó la guerra submarina indiscriminada, declarando que hundiría todos los barcos, incluidos los civiles, en las zonas de guerra. Esto aumentó la presión sobre el presidente estadounidense Woodrow Wilson para que tomara medidas.
– Intereses económicos: Los intereses económicos y comerciales de Estados Unidos también jugaron un papel importante. Las inversiones y préstamos de Estados Unidos a las potencias aliadas (principalmente el Reino Unido y Francia) crearon un vínculo económico importante. Si estas naciones perdían la guerra, podría afectar negativamente a la economía estadounidense.
El 2 de abril de 1917, el presidente Woodrow Wilson pidió al Congreso que declarara la guerra a Alemania, argumentando que el mundo debía ser «seguro para la democracia». El 6 de abril de 1917, el Congreso aprobó la declaración de guerra, marcando la entrada oficial de Estados Unidos en la Primera Guerra Mundial.
3- La revolución rusa
El Imperio Ruso, hasta antes de la guerra, funcionaba en base a un régimen zarista de economía agrícola, sin incorporarse de manera significativa a la industrialización. Esta situación tenía en un atraso económico profundo al país, quienes veían en sus masas campesinas la hambruna frente a un sistema medieval que no parecía cambiar.
Las primeras manifestaciones que solicitaban cambios de esta panorámica fueron en el año 1905: manifestación frente al palacio de invierno, fuertemente reprimida por el ejército, y conocida como domingo sangriento. A pesar de las muertes, esta manifestación sí tuvo efectos positivos: el zar reconoció algunas libertades cívicas, ampliación de la ley electoral, entre otras. Aquí nacen los soviets, consejo de trabajadores y campesinos, quienes se organizaron en las primeras huelgas. A pesar de las reformas, el zar Nicolás II continuó con su comportamiento autoritario, sin tomar en cuenta las libertades cívicas que anteriormente había prometido.
Así llega el año 1917, cuya revolución cambiará para siempre el curso de esta nación:
– La revolución de febrero: consiste principalmente en una huelga de obreros, que inicialmente fue reprimida por el ejército, pero que posteriormente fue apoyada por ellos. Ante esto, la misma clase obrera decide terminar con el régimen, siendo Nicolás II obligado a abdicar, poniendo fin a años de historia absolutista.
Otra consecuencia de este proceso es la creación de un poder compuesto por dos grupos: la Duma (parlamento) con diputados de corte liberal, y el soviet de San Petersburgo.
– La revolución de octubre: los bolcheviques, de corte más marxista-comunista, llegan al poder, no sin antes un enfrentamiento civil con los mencheviques, de tendencias más conservadoras. Nacía el primer gobierno comunista del mundo, cuya primera acción fue el asesinato del zar y toda su familia. Asume la dirección de la nueva Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) Vladimir Lenin.
4- El final de la Gran Guerra
Con la llegada de EE. UU, la derrota de la Triple Alianza era inevitable: Inglaterra y Francia, a pesar de no contar con el Imperio Ruso, ahora tenían un aliado más poderoso, que no había sufrido en su territorio los embates de la guerra y que además estaba en buena situación económica para aportar recursos.
Finalmente, en 1917, los altos mandos del ejército alemán llegaron a la conclusión que la guerra no podía ganarse y recomendaron un armisticio (suspensión de hostilidades). El Kaiser Guillermo III abdicó, y se estableció un régimen republicano democrático que tuvo por capital la ciudad de Weimar, de allí que este período de la historia de Alemania se conozca como “República de Weimar”.
Ocurrido este proceso, ponerse de acuerdo entre los países sobre las consecuencias que debían existir para los vencidos fue muy dispar: Francia, quien había sufrido muchos daños y pérdidas estratégicas de territorios importantes quería las sanciones más duras para Alemania, quien fue responsabilizado casi en su totalidad por este conflicto; Estados Unidos tenía una visión mucho más conciliadora, pensando en el establecimiento de la paz de una forma mucho más duradera, para lo cual propuso la creación de una Unión General de las Naciones. El 11 de noviembre de 1918 se firma oficialmente el armisticio con Alemania.
En el tratado de paz conocido como Tratado de Versalles firmado en el año 1919 se establecieron las siguientes condiciones a Alemania:
– Entregar parte de su armamento y limitar su poderío militar. Lo anterior, porque no sufrieron daños en sus industrias ni en su integridad territorial.
– Renunciar a todas sus posesiones coloniales, con el fin de eliminarlo como posible competencia económica.
– Indemnizaciones económicas altísimas, especialmente para Francia, pero en la cual recibieron dineros Inglaterra y Estados Unidos.
– Debió entregar Dantzig y la Prusia Oriental a Polonia, y Alsacia y Lorena a Francia, lo que los privó de recursos naturales importantes, como el carbón.
5- Consecuencias de la Gran Guerra
La Primera Guerra Mundial tuvo profundas y duraderas consecuencias en varios aspectos, desde el político y el social hasta el económico y el territorial. Aquí hay algunas de las principales consecuencias de la Primera Guerra Mundial:
– Pérdidas humanas y sufrimiento: La guerra resultó en una pérdida masiva de vidas humanas. 90 millones de soldados y civiles murieron como resultado directo de los combates y las enfermedades asociadas con la guerra. Además, muchos sobrevivientes sufrieron traumas físicos y psicológicos.
– Reconfiguración del mapa europeo: El tratado de Versalles redibujó el mapa de Europa, creando nuevos países y alterando las fronteras existentes. Se desmantelaron imperios (como el austrohúngaro y el otomano), y se crearon nuevos estados independientes.
– Liga de Naciones: Como respuesta a los horrores de la guerra, la Liga de Naciones fue creada con el objetivo de mantener la paz y evitar conflictos futuros. Sin embargo, la Liga no tuvo éxito en prevenir la Segunda Guerra Mundial y fue reemplazada por las Naciones Unidas después de la Segunda Guerra Mundial.
– Cambio en las alianzas y el equilibrio de poder: Las alianzas tradicionales en Europa se vieron afectadas y el equilibrio de poder cambió. Nuevos estados surgieron y otras naciones perdieron influencia.
– Revoluciones y cambios políticos: La guerra provocó revoluciones y cambios políticos en varios países. En Rusia, la Revolución Rusa de 1917 llevó al establecimiento del régimen comunista bajo los bolcheviques.
– Desarrollo de nuevas tecnologías militares: La guerra aceleró el desarrollo de tecnologías militares, como tanques, aviones, armas químicas y tácticas de guerra modernas.
– Impacto económico: La guerra dejó a muchas naciones endeudadas y con economías debilitadas. Las reparaciones impuestas a Alemania, en particular, contribuyeron a la inestabilidad económica y política en el período de entreguerras. El costo de la agricultura y de la industria en estos años fue mucho más alto, ya que estas actividades se encontraban casi totalmente paralizadas por la industria militar; la destrucción masiva del territorio cultivable, de las ciudades y de infraestructura en general contribuyó a que la recuperación económica fuese cada vez más lenta. Ante esta situación el gran beneficiado fue Estados Unidos, quien, al no enfrentar la guerra en su territorio, se encontraba en condiciones incluso de prestar dinero.
– Influenza de 1918: La pandemia de influenza de 1918, conocida como la «gripe española», coincidió con la guerra y tuvo un impacto devastador, causando millones de muertes en todo el mundo.
– Sociales: la transformación del rol de la mujer en la sociedad, pasando de ser una dueña de casa a ser un puntal fundamental por cuanto a economía se refiere, la llevará incluso más adelante, a gozar de beneficios civiles; otra consecuencia es la profunda crisis económica que dividió a la sociedad en dos grupos: los obreros, campesinos y artesanos, quienes sufrieron casi todo el peso del conflicto y los burgueses y empresarios, quienes lograron sacar provecho de este terrible momento.
Las consecuencias de la Primera Guerra Mundial resonaron en el siglo XX y moldearon el curso de los eventos globales en las décadas siguientes. La guerra sentó las bases para muchos de los problemas y desarrollos que se producirían en el siglo XX.
